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El modelo eléctrico ya ha recibido la correspondiente homologación para poder recorrer las calles de la capital.

Por la capital de España uno se puede encontrar taxis de diferentes fabricantes con tecnologías variadas, pues están los eléctricos de Tesla o Nissan, así como los híbridos convencionales procedentes de Toyota, los híbridos enchufables de Renault o Peugeot, sin olvidarnos de otros modelos que utilizan combustibles alternativos como el GLP o GNC. Sin embargo, a partir de ahora se abre la puerta a una tecnología inédita hasta la fecha: la pila de combustible de hidrógeno.

Decimos esto porque el Ayuntamiento de Madrid ha dado el visto bueno al Toyota Mirai, un modelo eléctrico alimentado por hidrógeno que ya cuenta con la autorización correspondiente como para desempeñar las labores de taxi por la capital española, convirtiéndose en todo un pionero de su clase. El Área de Gobierno de Medio Ambiente y Movilidad del ayuntamiento madrileño ha sido el encargado de emitir una ficha en la que se detallan todas las características que deberá cumplir la berlina japonesa, tales como el color blanco de la carrocería, la franja roja de 100 mm de ancho y la ubicación de los distintos adhesivos.

Dado que desde el pasado 1 de enero de 2018 todos los vehículos que presten servicio de taxi en Madrid (a excepción de los eurotaxi) deberán contar con unos niveles de emisiones reducidos, de manera que opten a los distintivos ECO o Cero de la DGT. En este sentido, el Toyota Mirai no tendrá ningún problema ya que su pila de combustible le garantiza el acceso al segundo etiquetado, es decir, el más eficiente de todos pues por el tubo de escape de este coche simplemente se expulsa vapor de agua.

El Toyota Mirai ha conseguido la homologación como taxi de cinco plazas.

Esto, a su vez, supone un problema en la actualidad ya que en Madrid solo existe una estación de servicio que suministro el hidrógeno necesario para mover al vehículo. La hidrogenera a la que hacemos referencia se sitúa en la Avenida de Manoteras (zona de Sanchinarro) y para poder repostar se necesita autorización previa. Es por ello que, probablemente, tardemos un tiempo en encontrarnos con uno de estos ejemplares por las calles madrileñas, a la espera que se construyan más instalaciones de este tipo para los vehículos eléctricos de pila de combustible.

El Toyota Mirai cuenta con un motor eléctrico que produce 182 caballos de potencia y un par máximo de 300 Nm, asociado a una transmisión automática de una única velocidad que envía toda la energía al tren trasero. El coche alcanza los 175 km/h de velocidad máxima y su autonomía es de 650 kilómetros, con un consumo medio de 0,79 kg a los 100 km.